EL ARTE COMO OFICIO: Los frescos de la Rábida de Daniel Vázquez Díaz

Programa Gente de Andalucía del 22_08_2020

Esta obra siempre me maravilló. Mis padres me llevaron a verlo cuando era pequeño y se me quedó en el imaginario pictórico para toda la vida. Gracias papá y mamá.

En 2015 fui a verlo y fotografiarlo con un motivo concreto y lo publiqué en este mismo blog. En esta entrada de hoy lo voy a ampliar.

Esto fue lo que publiqué en 2015.

Voy a copiar uno de estos frescos con mis alumnos en un lienzo grande para colgar en la pared de un pasillo (PUEDES VERLO AQUÍ). Lo he buscado en Internet, y resulta que no se encuentran imágenes buenas, así que me he ido allí, y con mi teléfono he hecho estas fotos. Para que todo aquel que quiera se las pueda descargar. Es una obra maravillosa de un pintor andaluz, genial. Es difícil de reproducir pues al ser un fresco, no tiene mucha definición ni colores muy brillantes.

Fresco 0. Está sobre la entrada a la sala de los frescos, sobre la puerta, por el exterior tendrá unos dos metros de anchura. Representa la llegada de Colón al Monasterio para acordar con los franciscanos, entregando una credencial.

Una vez que se entra en la sala nos encontramos los frescos en sentido de las agujas del reloj tal y como yo los he colocado aquí.

Fresco 1: La puerta que se ve es la puerta de entrada a la sala. Del otro lado está el fresco que hemos visto anteriormente (llegada de Colón al Monasterio). Este fresco es el que voy a copiar en el Instituto. Representa la despedida.

Fresco 2: Este sería el segundo. Colón mirando al mar y unos ángeles guía. A mi es el que más me gusta.

Fresco 3: Pared en frente de la de la puerta de entrada. Representa Colón explicando a los frailes.

Fresco 4. Representa a los marineros y de fondo el mismo Monasterio de la Rábida.

Detalle del fresco 1. Es un autorretrato del pintor.

Detalle del fresco 2. Colón , es un retrato Ortega y Gasset.

Detalle del fresco 3

Detalle del fresco 3. El fraile moreno es Rubén Darío.

Detalle del fresco 4.

Esta información que escribo a continuación es ya cosecha de agosto de 2020, y amplia el conocimiento de esta obra.

Vázquez Díaz contaba que desde su juventud tenía la idea de plasmar la historia del descubrimiento de América en pinturas. No era solo una idea, hizo cientos de bocetos. Los primeros trabajos los mostró en mayo de 1927 en una exposición en el Palacio de Bibliotecas y Museos de Madrid. La crítica valoró el proyecto y lo que resultó bastante clave para el mismo fue el hecho de que el rey Alfonso XIII visitara la exposición.

Dibujo previo para los frailes

El ministro de Marina de aquel entonces era Honorio Cornejo Carvajal, de Zalamea la Real, presentó a Vázquez Díaz al ministro de Instrucción Pública, José Calleja, quien presentó el proyecto al Gobierno. Se pidieron informes a la Academia de Bellas Artes que contestó con un informe adverso, y a la Academia de la Historia que tampoco se pronunció de manera favorable, aunque no con rotundidad. A lo que se unía la falta de apoyo del prior del monasterio, que no entendía en un monasterio del siglo XVI una pintura moderna y geométrica.

En aquellos momentos se realizaba el Monumento a Cristóbal Colón en la Punta del Sebo. Un empeño también que no fue fácil, tuvo que contar después de mucha insistencia de sus promotores, la Columbus Memorial Fund, y de la propia escultora el apoyo Gertrude Vanderbilt Whitney. El pintor acude a los actos de inauguración del Monumento a Colón y en la recepción en el monasterio de la Rábida coincidió con el presidente del gobierno de entonces, que era el primo de Rivera, y este le dio su apoyo allí mismo delante de todos, de tal manera que lo publicó la prensa.

Y quién iba a pagar aquello. Pues se pudo hacer gracias a la escultora miss Whitney que dió una cantidad considerable para hacer en el monasterio de La Rábida un museo de América. La obra de Vázquez Díaz sería la primera de las obras de arte de este museo.

Los trabajos de Daniel Vázquez Díaz, al que ayudó su hijo Rafael Vázquez Aggerholm, se iniciaron el 12 de mayo de 1929. El artista estuvo prácticamente un año viviendo en La Rábida, en la casa de los peones camineros, hoy convertida en punto de información.

Se concluyeron el 12 de octubre de 1930 cuando se celebraba entonces la fiesta de la Hispanidad, fue cuando se dio a conocer en la prensa nacional la obra concluida aunque no se celebró acto alguno de inauguración como tal porque el momento político y social de la época eran terrible y además, había fallecido Primo de Rivera y las noticias eran los movimientos de huelgas, como ocurría en la propia provincia de Huelva. Una situación nada propicia para evento inaugural, aunque sí contará con el reconocimiento de la prensa nacional.

Con esta obra le llegó el reconocimiento de todos. En Nerva, su pueblo le nombraron "Hijo adoptivo" de la localidad.

Está pintado al fresco. ¿Y cómo se pinta un fresco?

Este vídeo muestra muy rápido como se hace. Voy a dar unos detalles más por orden cronológico:

Vázquez Díaz tuvo que preparar las paredes con un revoque (mezcla) de cal con arena, y después dibujar sobre ellos.

Este dibujo tiene la misma forma y tamaño que la pintura que se va a representar, y suele ser en blanco y negro.

Se hace sobre papel que tiene la misma forma que la pared. Aquí en estos dibujos se puede corregir, en la pared no.

Luego agujerea el papel con un punzón sobre las líneas dibujadas.

Y se coloca sobre la pared.

Y con una muñequilla de polvo de carbón se espolvorea por encima del dibujo.

Luego se quita el papel y el dibujo ha quedado marcado en la pared. Esta técnica se llama estarcido.

Lo que ha quedado en la pared es polvo de carbón que se va muy fácilmente con un roce por lo que hay que tener cuidado de que permanezca allí.

Luego se rellena con otro revoque solo la parte que se va a pintar en una jornada, porque el revoque se seca y solo se puede pintar mientras esté fresco. De manera que si en un día solo va a pintar la figura de Cristóbal Colón, solo enfosca esa figura.

Se pinta con los pigmentos sin mezclar con ningún aceite ni polímero ni cola. Se diluyen en agua para facilitar el uso de los pinceles. Si esta mezcla con agua tiene más pigmento, el color será más denso, y si tiene menos pigmento, será más transparente, parecido a la acuarela.

Cuando el revoque se seca, la cal forma una capa cristalina en la superficie que protege al color y queda una pintura con mucha perdurabilidad.

Así que cada retrato tan bien hecho que tiene Vázquez Díaz en la Rábida tiene una dificultad enorme. Y por eso en una sala tan pequeña (era la sacristía) tuvo que trabajar un año entero y con un ayudante.

Los retratos son todos de personas reales, de Moguer y de Palos,

El estilo artístico de Vázquez Díaz, es un realismo geometrizante. Recuerda al cubismo en la manera de poner la pincelada y en el uso de la línea, pero en en el concepto. Este estilo es muy propicio para la pintura al fresco. Su estilo ha influido tanto en los pintores españoles posteriores que hasta los años 70 se ha seguido su pauta formal.

Daniel Vázquez Díaz fue un pintor maravilloso nacido en Nerva (Huelva) que se tuvo que buscar la vida para ganarse el sustento y lo hizo a base de crear una obra de mucha calidad. Llegó a ser muy conocido y eso que su pintura no era completamente tradicional, ni velazqueña, que siempre resulta más fácil para el que le encarga un retrato, para el coleccionista o para el mecenas.

A mi siempre me ha encantado este cuadro. La Cuadrilla de Juan Centeno.

Las pinturas de La Rábida, se han usado políticamente como símbolo nacional español, por su contenido. Y eso ha hecho desaparecer ante el público la calidad de la pintura, aunque también le ha dado fama.

El resto del Monasterio de la Rábida es también muy interesante. El exterior del convento de ladrillo y cal, con zonas ajardinadas. Entrando por el vestíbulo, a la izquierda ya está la sala de Vázquez Díaz y desde la sacristía se pasa a la iglesia. Lateral a esta el Patio de las Flores y a los pies el Patio Mudéjar.

http://www.monasteriodelarabida.com/