"Pablo Diego José Francisco de Paula Juan Nepomuceno Cipriano de la Santísima Trinidad".

Profesor: Hubo un chaval andaluz, de la parte de Málaga, hijo de un profesor de dibujo. Tenía un nombre muy extraño, se llamaba:

"Pablo Diego José Francisco de Paula Juan Nepomuceno Cipriano de la Santísima Trinidad".

Alumna: Menos mal que de pequeño era muy bueno y su madre no tenía que llamarlo a gritos.

Profesor: Con un nombre tan largo, como es normal, se le quedó Pablo.

Le gustaban mucho la lectura y el dibujo. Tanto él como sus dos hermanas tenían a su disposición los libros y las pinturas de su padre.

Alumna: Vamos que en esa casa era lógico que Pablo se entretuviera dibujando, pintando y leyendo.

Profesor: Con siete años fue a una corrida de toros con su padre, y después pintó un cuadro que tituló "El pequeño picador". Su hermana pequeña le hizo unos agujeritos con un clavo en los ojillos de los personajes, y a él no le gustó nada. Pero el cuadro le quedó muy bien.

Alumna: Ahora que miro este cuadro creo que está bien pintado para un niño de tan corta edad, pero tampoco es para tanto... El caballo es muy pequeño, y el picador muy grande.

Profesor: No parece el cuadro de un genio de la pintura.

Alumna: ¿Y por qué este niño tendría que ser un genio?

Profesor: Porque se trata de Pablo Picasso.

Alumna: ¿Y a qué viene que me enseñes este cuadro, que no me enseña nada, con la de cuadros de Picasso que hay tan raros, y tan bonitos?

Profesor: Viene a que Picasso guardó durante toda su vida este cuadro, y fue el autor más creativo del Siglo XX.

Alumna: ¿Y el cuadro qué tiene que ver con eso?

Profesor: Pues tiene que ver, porque es su principio. Y él era un hombre que no dejó de estudiar nunca, y conoció todos los estilos artísticos, pero siempre rebuscó en sus principios. De hecho siempre volvía al tema de los toros, que comenzó con su padre cuando tenía siete años. Hacía algo muy creativo, y muy moderno, original que nadie había hecho antes, y después recuperaba sus principios.

Alumna: ¿Para no volverse loco?

Profesor: Para seguir inventando. La creatividad viene de ahí, de los principios. ¡Y de loco nada ehh!

Alumna: Pero... ¿tan al principio?

Profesor: Él decía que no se evoluciona

Alumna: ¿Y siempre siguió haciendo lo mismo?

Profesor: Dale al "PLAY" del vídeo, en unos segundos saldrá una pintura parecida de cuanto tenía 80 años.

Alumna: ¿Le doy?

Profesor: Dale y cuando ponga "Stop", le das a la PAUSA.

Profesor: Picasso dijo una vez:

- "Desde niño pintaba como Rafael, pero me llevó toda una vida aprender a dibujar como un niño".

Alumna: ¡Vaya, pues es verdad que pensaba así, qué curioso! ¡Claro que para las mujeres es más difícil!

Profesor: Sí que es más difícil, o al menos lo ha sido hasta hace unos años, pero las obras de arte tienen una cosa importante, es que cuando alguien las ve y las considera buenas, no le importa si quién la ha hecho es un hombre o una mujer. Lo importante es lo que expresa.

Alumna: ¿Y hay mujeres en la Historia que hayan triunfado en esto de la escultura?

Profesor: ¿que si las hay? Busca imágenes de esculturas de Carmen Laffón, verás qué cosa más bonita e intersante.

Alumna: ¡Y a todo esto, Picasso era pintor, no escultor!

Profesor: Dale al "PLAY" del vídeo...

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